Es muy preocupante el tema de la automedicación en España, los países de Latinoamérica
y buena parte del resto del planeta. Muchas personas ingieren medicamentos sin
ningún tipo de control médico o farmacéutico. Concretamente en el caso de los
resfriados, uno de cada diez españoles toma antibióticos sin receta para combatirlo
y en cifras similares en el resto del mundo.
Pildora de antibiótico (ascárida)
¿Es necesario tomar antibióticos para sanar un resfriado?
El doctor Primitivo Ortega, presidente de la Sociedad Española de
Otorrinolaringología, advierte que los antibióticos no sirven para tratar virus
como los de la gripe y el resfriado, y dice: “Son solo eficaces cuando se trata
de infecciones bacterianas, que representan un porcentaje muy pequeño en
total”.
Siguiendo al doctor Ortega, al igual que a muchos otros médicos de todo el
mundo y a organizaciones internacionales como la OMS que dice, entre otras
muchas cosas, que si continúa el uso inadecuado de los antibióticos, surgirán
nuevos virus incurables, hay que resaltar la importancia del uso responsable y controlado por expertos
facultativos del uso de estos medicamentos.
Además, hay que tener en cuenta, como se ha
resaltado anteriormente, que en muchos
casos la ingesta de antibióticos no combate la dolencia adquirida, como es el
caso de las enfermedades de origen vírico.
¿Qué consecuencias puede acarrear la toma de antibióticos sin control
facultativo?
El uso indiscriminado o erróneo de los antibióticos provoca que las
bacterias adquieran defensas genéticas para un futuro, en lo que se denomina
“resistencia antibiótica”. ¿Y qué significa todo esto? La respuesta es
sencilla, pues que en casos de enfermedad bacteriana, en donde sí son adecuados
los antibióticos, puede ocurrir que estos no hagan efecto debido a la
“resistencia” antes mencionada.
España es uno de los países con más cepas resistentes, debido a que más del
30% del consumo de este tipo de medicamentos, se realiza sin indicación médica.
Ante esto, el Ministerio de Sanidad español lanzó una campaña informando sobre
el tema.
Por tanto, hay que ser coherentes y evitar automedicarse en general, y en
el caso de antibióticos en particular, ya que con ello se pueda crear un conflicto
muy grave en el futuro. Además, existe
otro problema importante en el caso de no estar controlado por un médico o no seguir las indicaciones debidamente, y es la
forma adecuada de tomarlos.
La forma correcta de
tomar antibióticos
Siempre hay que seguir las instrucciones del médico cuando se prescriben
antibióticos, pero a título informativo es interesante saber diferentes cuestiones:
-
Debe tomarse toda la dosis indicada aunque los síntomas de la enfermedad
hayan desaparecido.
-
Hay que respetar el intervalo de tiempo entre toma y toma, es decir si el
médico indica que se tome una capsula cada 8 horas, es muy importante realizar esta indicación minuciosamente, ya que de otro modo puede no funcionar de modo
correcto.
- No se debe duplicar la dosis en casos de olvido.
En definitiva, la
ingesta de antibióticos es un tema muy serio que no se debe tomar a la ligera,
ya que las consecuencias pueden ser muy negativas. En todo caso, es totalmente
necesaria la consulta al médico y el escrupuloso seguimiento de sus
indicaciones.
Por último, y a modo
de conclusión, hay que dejar totalmente claro que los antibióticos no sanan un
resfriado ni una gripe, por lo que son innecesarios, a no ser que se sume
alguna otra complicación en el proceso, como una infección bacteriana, y en ese
caso tendrá que ser el doctor quien indique qué antibiótico tomar y cómo
hacerlo.
Lola Sancho
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